26 de noviembre de 2019
Los niños de la Guajira merecen nutrición adecuada
Por: Maria Paula Cerquera Plaza
Según UNICEF, “La desnutrición infantil es el resultado de la ingesta insuficiente de alimentos, la falta de una atención adecuada y la aparición de enfermedades infecciosas”. En Colombia, y en especial en la Guajira, esta es una problemática de salud pública actual que preocupa a gran parte de los colombianos, en tanto trae consigo la muerte y alteraciones en la salud de muchos niños.
Desnutrición: ¿causa de la corrupción?
La cifra de desnutrición infantil en la Guajira es muy alta, siendo este el departamento con las tasas más elevadas. Según el ICBF, en diciembre de 2018 se identificaron 3500 menores que no recibían alimentación adecuada o en riesgo de desnutrición en esta zona del país. En cuanto a muertes por desnutrición, según la Defensoría del Pueblo, fueron reportados 82 casos en 2016, cifra que aumentó cerca del 74% respecto al 2015 (48 casos).
Las principales causas de la desnutrición en la Guajira son las condiciones precarias de vida relacionadas con elementos de orden estructural: la pobreza, el 53% de la población de la Guajira vive en esa condición, y la desigualdad; el estado de los servicios de salud y servicios públicos, teniendo en cuenta que el 76% de la población del departamento vive en municipios en los que no se tratan las aguas residuales adecuadamente; la corrupción; el conflicto armado; los procesos de extracción minera, y la debilidad de los programas de atención a la infancia. Como lo indica el senador del Polo Democrático, Alexander López Maya (2019): “La falta de agua, de salud y la corrupción influyen en esta barbarie que está afectando a niños y adolescentes”.
La corrupción ha sido una de las principales causas de desnutrición infantil en la Guajira. En los últimos 24 años la Guajira ha tenido 12 gobernadores como consecuencia de una cadena irregularidades y corrupción en el manejo de recursos destinados a combatir la desnutrición en este departamento. En la Guajira no hay eficiencia, ni transparencia en la ejecución de los recursos del gobierno, demostrando que, si hay debilidad institucional, la descentralización del poder no es una buena opción. Según Bonet y Hahn (2017): “instituciones de control como la Contraloría General de la República (2016), la Defensoría del Pueblo (2015), entre otras, han manifestado su preocupación por la pérdida de los recursos públicos en el departamento y que parte de las inversiones de entidades gubernamentales pudieron ser empleadas con objetivos distintos al especificado por los programas de nutrición”. Como consecuencia de esto, la Fiscalía General abrió una investigación conocida como “Bolsillos de Cristal” con el objetivo de acabar con las irregularidades e imputar cargos a los funcionarios públicos, contratistas y particulares que desfalcaron al departamento por medio de la celebración de millonarios contratos y robaron los recursos destinados a atender la desnutrición.
Mecanismos implementados para disminuirla
Por parte de organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, han surgido muchas iniciativas y planes con el objetivo de disminuir la mortalidad y desnutrición en Colombia, principalmente en la Guajira.
La Ruta Integral de Atención de la Desnutrición Aguda es uno de los planes orientados a disminuir esta problemática de salud pública. El ministerio de salud y Protección Social y UNICEF han implementado este mecanismo en el que se han atendido cerca de 5750 menores entre 0 y 59 meses en la alta Guajira, equivalentes al 14% de la población total de esta edad y de esta zona. Dicha iniciativa demuestra el compromiso del gobierno para mejorar las condiciones de estas comunidades indígenas.
La OPS/OMS Colombia ha venido incrementando sus acciones en la Guajira: la Semana de Vacunación en las Américas se realizó en las Rancherías Comunidad Couchachun y Puerto Caracol en Riohacha (Guajira). Durante esta jornada, se recomendó a las instituciones realizar la vacunación en el marco de atención más integral a la comunidad, teniendo en cuenta que a los niños con desnutrición aguda se les deben aplicar todas las vacunas estipuladas en el Programa Ampliado de Inmunizaciones ; además, se busca apoyar la construcción de una cartilla pedagógica que oriente la práctica de la lactancia materna, el inicio de la alimentación complementaria y facilite la identificación de signos y síntomas de desnutrición aguda; sin embargo, esto no se ha hecho.
En conclusión, el gobierno debe terminar con el fenómeno de la corrupción para que su intervención en la Guajira sea más efectiva y de esta forma disminuya la alta cifra de desnutrición y de mortalidad a causa de la misma; así mismo, debe priorizar la implementación y cumplimiento de políticas públicas y campañas que satisfagan y solucionen esta problemática.
Recomendados Libre Pensador
Bonet, J. y Hahn, L. (2017) “La mortalidad y desnutrición infantil en la Guajira”.
Cámara de Comercio de la Guajira. (2016) “Informe económico 2016 Departamento de la Guajira”.
El Heraldo. “Muertes por desnutrición infantil subieron 36% en 2018”.
Minsalud. (2015). “Integridad, clave en la atención de salud nutricional en La Guajira”.
OPS. “Visita de la OPS/OMS Colombia a la extrema alta Guajira”.
Pérez, V. (2019). “Casi dos millones viven en municipios sin alcantarillado”.
LatinAmerican post – “La Guajira: muestra de la corrupción en Colombia”.
RCN Radio – Preocupante cifra de menores en riesgo de desnutrición en La Guajira.