Una salida tributaria: los paraísos fiscales

Por: María Camila Díaz

Los paraísos fiscales han generado una creciente inversión extranjera. Las empresas con grandes ingresos como las multinacionales, entidades financieras y las grandes fortunas le huyen a la valoración tributaria del país donde residen, por lo tanto, para “garantizar” su crecimiento usan como instrumento la evasión o disminución de cargas fiscales por medio de los paraísos fiscales. Sin embargo, una de las implicaciones que trae consigo este sistema es la reducción de presupuesto público. Según la revista virtual Dinero, “la Oxfam (confederación internacional formada por 17 organizaciones no gubernamentales nacionales) señala que cuando se reduce la tributación a las empresas, los Gobiernos tratan de equilibrar sus cuentas decidiendo el gasto público o subiendo impuestos como el IVA” (2017).

Déficit económico

Aunque sea paradójico, el periódico El Tiempo señala que “el 27 por ciento de la riqueza privada total de América Latina está depositada en países que ofrecen un tratamiento impositivo favorable para los más acaudalados”.  Situación que alarma a gran cantidad de los países alrededor del mundo, en tanto, genera reducción de los recursos necesarios para el bienestar de la población.

Los recursos que los estados dejan de percibir a raíz de la evasión de impuestos, Colombia no es ajena a esta situación, implican un déficit fiscal, por lo cual el Estado deberá recurrir a fuentes de financiación, en muchos casos, al endeudamiento. De igual manera, afecta las posibilidades de inversión y crecimiento económico. Según el periódico financiero La República, “un estudio conjunto de las universidades de Noruega, Copenhague y Berkeley (California), un 9,8% del PIB mundial se encuentra fuera del radar de las autoridades” (2017). Esta cifra supone escape de los ingresos y fuga de capitales, lo que constituye uno de los problemas económicos más grandes que enfrentan los países en desarrollo.

Offshore Vs Onshore

Por otro lado, existen sociedades “fantasmas” también llamadas offshore, según la guía de paraísos fiscales “offshore significa en el mar o alejado de la costa, también significa fuera del país de residencia donde se obtienen los recursos económicos y procesos de productividad” (s. f). En adición, son montajes financieros que arman los paraísos fiscales para protección de las empresas, otorgan, además, confidencialidad, privacidad y ventajas fiscales. Estas empresas se caracterizan principalmente porque están registradas en un país en el que no ejercen actividad económica, y además utilizan al país como domicilio legal.

Algunos territorios que han sido clasificados por el Fondo Monetario Internacional como centros financieros offshore son: Andorra, Anguila, Aruba, Bahamas, Belice, Bermuda, Islas Vírgenes Británicas, Islas Caimán, Islas Cook, Chipre, Gibraltar, Guernsey, Isla de Man, Malasia, Panamá. Algunos identifican los paraísos fiscales como pequeñas islas exóticas y alejadas que difícilmente pueden ser regulados o intervenidos.

Las empresas –como estrategia para evitar fiscalización de sus transacciones– utilizan países intermediarios que les facilitan mover su dinero sin tributar, como lo son, Holanda, Reino Unido, Suiza, Singapur, Irlanda. Verbigracia, entre el 2007 y 2009 Google transfirió 12.500 millones de dólares a través del país intermediario Holanda, Apple para evadir 14.500 millones dólares utilizó desde el 2003 a Irlanda, beneficiándolo de pagar solo el 0.005% de impuestos.

Por otra parte, onshore hace alusión según la guía de paraísos fiscales “significa al interior de la tierra, en el país de residencia, donde se obtienen los recursos económicos y procesos de productividad”, quiere decir que son aquellas empresas que se crean en su país de domicilio y tributan legalmente.

En otras palabras, la diferencia entre uno y el otro concierne en que offshore son aquellos países donde hay pocos impuestos o en su defecto la tributación es nula, y, por otro lado, onshore son aquellos países donde su tributación es alta, por ejemplo, Alemania, Austria, Francia.

Ventajas fiscales

A pesar de acarrear distintas problemáticas como la posibilidad de realización de actividades criminales y la facilidad de corrupción, estos paraísos aportan innumerables ventajas fiscales a las empresas o personas que desean reducir o estar exentos del pago de impuestos. Verbigracia, no es obligatorio la declaración de estados financieros, no hay restricción o control para el movimiento de capitales, protegen información de las empresas, en tanto, no poseen convenios con otros países en materia tributaria.

Los paraísos fiscales han atraído principalmente por la información limitada del flujo de capitales que ejercen las empresas en dichos países, menor presión tributaria, y mayor estabilidad fiscal.

Como es de esperarse si se  forma una empresa, el objetivo principal es generar ganancias y menos gastos para evidenciar la utilidad; por ello, las empresas huyen de algunos países con altos impuestos, por ejemplo, en Europa, los impuestos que paga una persona física o empresa pueden suponer casi un 50% de sus ingresos.

Finalmente, no resulta ajeno al hecho de que colombianos aparecen en las revelaciones internacionales de los paraísos fiscales. Según la Organización de Justicia Tributaria en el escándalo de “Panamá papers” los colombianos tendrían depositados cerca de 14.125 millones de dólares, además, se estimó que cerca de 850 estarían involucrados. Los documentos que fueron revelados en este escándalo involucran según reportes de la revista virtual CNN a decenas de líderes políticos y famosos, como: el actual presidente de la Federación Rusia Vladimir Putin, la Federación Internacional de Fútbol (FIFA) Mauricio Macri, y el presidente de la nación argentina; estos documentos mostraban las distintas empresas de fachada que eran creadas para encubrir transacciones financieras.

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