13 de diciembre de 2015

¿Europa cae en el abismo?

Por: Daniela Varela Guillén - Cátedra Europa.

En 2004, Grecia se mostró ante el mundo como un estado fuerte y capaz de ser sede de los juegos olímpicos. En ese entonces su población gozaba de una calidad de vida superior al de otros países por ser un estado benefactor, según indicadores de esperanza de vida al nacer para el 2007 proporcionados por datosmacro.com antes de la crisis este estaba en 79,70 cercano a países como Holanda e Irlanda y superior al de india e indonesia. A raíz de la crisis económica en la que cayo Grecia de 2008 hasta el día de hoy, su población a desmejorado el estilo de vida al que venía acostumbrado. Muchos cambios se efectuaron en los últimos años debido a las medidas de austeridad que la troika considero como solución para la crisis, las cuales contienen desde aumento de los impuestos, hasta pagos con fecha límite al BCE.

El drama detrás de esto consiste en que la sociedad griega antes de la crisis solo padecía de burocracia y corrupción dentro de su estado, empero nunca de miedo a quedar en la absoluta pobreza como lo muestra un artículo de The Guardian en la que se afirma que más de un tercio de la población griega está hoy en día en peligro de caer en pobreza extrema.

La percepción de la vida en Grecia cambio rápidamente, debido a que la crisis colapso su sistema financiero, en menos de 10 años[1], su PIB se redujo en 25% y la economía llego a contraerse un 8,9% para 2011, la cifra más baja conocida en Grecia.

La recesión griega

Como se puede ver en el gráfico la crisis griega vs la de la UE y EEUU muestra un déficit en un período de tiempo más reducido que la crisis que tuvo EE. UU.. Por lo que podemos inferir que las personas en EEUU vivieron más tiempo en la crisis lidiando día a día con sus consecuencias, a diferencia de los griegos que como es evidente ha tenido que lidiar con estas consecuencias en un tiempo más reducido que en EEUU.

Los indicadores de desempleo y los niveles de pobreza no son muy alentadores, lo que lleva a la población a manifestarse. No solo es importante verlo desde el punto de vista económico, sino el grave impacto que esta crisis ha traído a los ciudadanos de Grecia perjudicando así su estilo de vida.

Un estudio de 2013 encontró que más de 120.000 profesionales, entre médicos, ingenieros y científicos, habían dejado Grecia desde el inicio de la crisis en 2010. Por lo que se puede evidenciar que la mano de obra más calificada de Grecia se está yendo del país. Una encuesta más reciente del Instituto Universitario Europeo encontró que de los que emigraron, nueve de cada 10 tiene un título universitario y más de 60% un grado de maestría, mientras que el 11% posee un doctorado.

El problema más grande sin duda son los altos índices de pobreza que presenta Grecia en los últimos años. Su urbe muestra que más de un tercio de la población del país, siendo cuatro millones de personas aproximadamente las que viven en Grecia, fue calificada en riesgo de pobreza o exclusión social para el 2014.

Las pensiones juegan un rol importante dentro de la sociedad griega que lleva acostumbrada a que el estado sea uno benefactor, el cual antiguamente ayudaba a las personas que no tenían edad para trabajar, a personas que por una u otra razón no lo podían hacer y a ciudadanos que ya habían cumplido con su tiempo y edad de trabajo. Sin mencionar el hecho de que muchas veces este canon que reciben las personas pensionadas ayuda al sustento de familias enteras, puesto que en este momento la mayoría de sus miembros no logra conseguir trabajo.

La crisis de la inmigración

Sumado a lo anteriormente dicho, otro problema que también está afectando a la población griega es la ola de inmigrantes que han llegado a Grecia buscando resguardo como consecuencia a la crisis global europea. También, el periódico El País en Colombia afirma que Grecia en lo que va de año ha alcanzado el récord de 502.500 personas, mientras que los centros para su recepción aún no se han establecido. Lo anterior genera preocupación dentro de la ciudadanía griega puesto que si ya no hay oportunidades para ellos van a escasear aún más ahora que la población se incrementa por la llegada de más personas a territorio griego.

Finalmente, podemos concluir que la situación de los ciudadanos griegos frente a la crisis que empezó en el 2008 y que sigue hoy en día es alarmante. No solo representa una recesión para unos sino que representa la terminación de oportunidades para otros. Las personas capacitadas y económicamente activas están en busca de nuevas oportunidades para su supervivencia y la de su familia inmigrado hacia otras partes de Europa, lo que nos hace preguntar ¿Quién ayudara a la mejoría económica de este país si no hay mano de obra calificada? Debido a las medidas de austeridad la tercera parte de la población en Grecia está siendo calificada en riesgo de pobreza o exclusión social ¿Cómo se podrá salir de esta crisis que ha impactado tanto en la población griega? ¿Cuál es el paso a seguir? Estas y más preguntas son a las que se enfrentan los políticos griegos y de la UE si no también los ciudadanos que en su estado de desesperación solo esperan un milagro.