3 de mayo de 2017
Perros, así sean criollos, amados en Colombia
Por: Alejandra Trejos
Todos los quieren, todos lo tienen, pero ¿cuántos son conscientes de la importancia que estos tienen en nuestra sociedad? La respuesta es simple, no muchos, pero… ¿qué los hace tan especiales? Existen otros animales que también son ideales mascotas, pero ¿cuántos son fieles compañeros? Como muchos dicen por ahí “el perro es el mejor amigo del hombre”. A partir de las anteriores preguntas en el presente artículo se tratarán los siguientes temas: los perros como principales mascotas del país, el problema de los callejeros, la nueva raza colombiana, las razas preferidas por los colombianos y, finalmente, los beneficios derivados de estas mascotas.
Los más preferidos por los colombianos, ladran
Un estudio de la revista Dinero, realizado en el año 2012, muestra que en Colombia el 29% de las personas tienen mascotas y de este porcentaje aproximadamente el 80% son perros. Lo que lo convierte en la mascota por excelencia de los colombianos, esto a su vez genera que se destine un importante porcentaje del ingreso mensual de la familia dirigido a objetos o servicios caninos, entre los que se encuentra su comida, visitas al veterinario, juguetes y más. Según la página de El Heraldo comenta que la industria canina recibe anualmente utilidades que oscilan entre los 600.000 millones de pesos. A partir de lo anterior, se puede medir la importancia que estos animales tienen para las familias e individuos colombianos.
Perros de calle
No todo es “color de rosa para estos animales”, desafortunadamente, tal como lo plantea “El Tiempo” se estima que por cada 100 perros con hogar existen otros 38 que deambulan por las calles. Esto muestra una gran problemática social, ya que estos animales al no estar vacunados pueden transmitir un sin número de enfermedades, tanto a otros animales como a la población civil. Además, al no estar esterilizados estos se siguen reproduciendo de manera exponencial agravando esta problemática. Pese a ello, existen distintas organizaciones de carácter social, las cuales se dedican a fomentar la adopción de perros de la calle al igual que velar por el cuidado y esterilización de ellos, como lo son: la Sociedad Protectora de Animales de Colombia, Fundación S.O.S Apoyo Animal, Federación de Entidades Defensoras de Animales y del Ambiente de Colombia, Centro de Estudios Abolicionistas por la Liberación Animal-CEALA, entre otras. Es importante recalcar que estas organizaciones, además de enfocarse en la problemática que deriva de los animales de calle, se centran también en el respeto que se le debe garantizar a todos los seres vivos haciendo valer sus derechos y fomentando una cultura de respeto y cuidado animal dentro del territorio nacional.
Nuestra propia raza
Si bien ya se sabe que los perros son parte de la cultura colombiana, tanto para bien o para mal; muchos no saben que Colombia tiene su propia raza de perros. Conocida como Sabueso Fino Colombiano, esta es la primera raza autóctona del país. En un arduo estudio realizado por estudiantes de veterinaria de la Universidad Nacional, estos llegaron a la conclusión de que todos los perros que se suponían podrían ser de un mismo grupo, cumplían con las características necesarias para formar la primera raza colombiana. Entre las características se encontraron: similitud en su tamaño, una morfología similar y capacidad de pasar estas características a su descendencia y que estas permanezcan en su acervo genético. Entre las características que estacan al “Fino”, como usualmente se le denomina en distintas veredas, se encuentran su habilidad para la caza, gracias a su excelente olfato y adaptabilidad a cualquier terreno, adicionalmente, es un perro noble y tranquilo, aunque no se puede desconocer que es un perro de finca. El hecho de tener una raza propia de perros impulsa la cultura canina que ya se puede ver en el país, reforzando el imaginario de la importancia de estos en nuestra sociedad.
Las razas preferidas de la región
Aunque en toda Latinoamérica existe una gran variedad de caninos, los principales y que más se encuentran en la región, siguiendo a Perrospedia son: El Labrador Retriver, que se destaca por su inteligencia y amabilidad con los niños; Los Pastores Alemanes, quienes sobresalen por su lealtad y protección que brindan a las familias; El Yorshire Terrier, que a pesar de su tamaño fueron originalmente creados para objetivos de caza y El Beagle, comúnmente considerado como una mascota pequeña y divertida. Además, se tiene al Golden Retrevier – primo cercano del labrador– muy apreciados por las familias gracias a que son juguetones y amorosos; los Buldogs que se destacan por ser dóciles y amigables; y finalmente los Poodle, famosos por su alta energía e inteligencia. Lo anterior muestra las distintas razas más comunes en la región, más sin embargo existen un sin número que si bien son menos comercializadas, representan un importante porcentaje de perros en Latinoamérica.
Beneficios derivados de los perros
A pesar de que muchos los usan como animales de compañía, existen distintos tipos de perros, para distintas funciones específicas. Por ejemplo, para quien le gusta la cacería puede escoger entre el Braco Alemán, El Pointer Inglés, El Fox Terrier, La Akita Inu, el Border Collie, entre otros. De igual forma los caninos pueden ser vital para la adaptación a una “vida normal” de aquellas personas que no ven. Estos son llamados perros guías y reciben en un entrenamiento especial desde su nacimiento, ya que tienen la responsabilidad de “ser los ojos” de su amo. Es importante saber que no todos los perros pueden llegar a ser perros guías, el proceso de selección inicia al ser escogidos de entre su camada, donde solo uno o máximo dos, contarán con las características necesarias para llegar a serlo. De igual forma, muchos canes son utilizados en tratamientos de niños con síndrome de Down, ya que ayudan a sociabilizar a quienes se marginan de la sociedad; de igual forma sirven como apoyo y se crean lazos de amistad, pues a menudo quienes padecen de este síndrome son marginados por la sociedad.