22 de mayo de 2018
¿Hasta qué punto la adicción a las drogas es un problema de contexto social?
Por: Juan David Calderón
El mundo ha experimentando un incremento en la adicción al consumo de sustancias psicoactivas. Generalmente, se ha atribuido la dependencia a las drogas a una exigencia fisiológica; el cuerpo demanda el psicoactivo. Está comprobado científicamente que de no satisfacer dicha demanda del cuerpo, se pueden producir terribles síntomas de abstinencia, que varían según qué tan fuerte es la droga. Sin embargo, estudios han comprobado que no solo es una dependencia fisiológica hacia el narcótico, sino que el contexto social en el que habitan los dependientes influye en su capacidad de abstención y rehabilitación, debido a que las drogas son una compensación a la falta de una buena interacción social, que es de lo que realmente depende los individuos .
Adicción: ¿enfermedad crónica?
Los médicos afirman que las adicciones a sustancias psicoactivas o denominadas trastornos psicoactivos son enfermedades crónicas progresivas, que generan cambios en el cerebro y su actividad. Van ligadas al sistema nervioso central y generan neurotransmisores que exigen la sustancia y se sienten compensados cuando entra en el organismo, haciendo que el cuerpo dé una respuesta positiva al fármaco y una respuesta negativa cuando no se tiene. Esta respuesta puede contener dolor intenso, insomnio, alucinaciones, aumento del apetito, ansiedad, entre muchos otros.
La liberación de hormonas y neurotransmisores estimulan la persona, generalmente haciéndolo olvidarse de su realidad o distorsionándola. Todas las personas que quieren desfigurar la realidad es porque tienen un inconformismo con la misma, generalmente está dado por un contexto social adverso, falta de educación o prevención o una situación de interacción interpersonal que produce vacío o dolor en la persona. Esto lleva al primer consumo, el cual es totalmente voluntario, pero se ve totalmente influenciado por los factores de contexto ya antes mencionados.
Si bien es cierto que la abstinencia es un estímulo negativo que produce el cuerpo pidiendo una sustancia, se tienen ejemplos como la dependencia al LCD, que no produce ninguna adicción meramente fisiológica o más explícitamente, la adicción a los juegos, al sexo, pornografía, apuestas…. Todas estas dependencias también están relacionadas al contexto social, además, su imposibilidad de rehabilitación se debe a un desfavorable contexto social, que no ha podido ser cambiado o que posiblemente empeoró.
El entorno y su relación con las dependencias:
Según el estudio de Lee Robbinson, se observó que alrededor del 20% de soldados estadounidenses que participaron en la guerra de Vietnam se hicieron adictos a la heroína y derivados opioides durante el conflicto. Se presume que esta adicción fue impulsada por el implacable y mortal ambiente que se vivía durante la guerra. Cuando todo terminó y volvieron a casa, el 95% de los soldados dependientes pudo dejar la Heroína por sí mismos, ¿Por qué?, claramente un cambio de contexto, una interacción social con seres queridos y un ambiente social amigable, sereno y familiar, llenó el vacío que anteriormente intentaban calmar los psicoactivos.
Los estudios de Robbinson también llamaron la atención de científicos que decidieron experimentar con ratas, a quienes se les conoce por ser muy sociables y curiosas, del mismo modo que son los humanos. Durante el estudio, se plantearon diferentes escenarios: primero, una rata sola que podía escoger entre agua con heroína y sin ella, pero con sabor dulce, lo cual les fascina. Pasado un tiempo murió de sobredosis. En el segundo escenario se presentaron bastantes ratas con juegos y posibilidades de interacción, agua dulce con heroína y solo agua que fueron volviendo amarga, lo que les disgusta. Sin embargo, se estableció que pese a que les gusta el sabor del agua dulce, la evitaban, pues preferían poder interactuar libremente en vez de ver limitadas sus funciones por los efectos narcóticos.
Tanto en humanos como en ratas, y todo ser que tenga una dependencia a socializar, se va a encontrar que buscan un ambiente que los haga sentir cómodos y en una constante interacción con la comunidad y con las personas que los hacen sentir bien. Sin embargo, el contexto social no es el mismo para todos y no siempre es óptimo para el desarrollo personal. Estas personas pueden buscar una compensación en sustancias o actividades que los hagan sentir completos o llenar el vacío que deja la imposibilidad de una sana socialización y, por ende, se puede considerar que un contexto social negativo está estrechamente entrelazado con las adicciones.
En conclusión, el 95% de soldados que no necesitó de ningún tratamiento para dejar la heroína, el hábito común humano de socializar e intentar compensar situaciones adversas con adicciones, muestran que más allá de una mera adicción fisiológica, la dependencia a las drogas se ve influenciada también por un contexto social que no fue favorable a la hora de tomar la decisión sobre el primer consumo. Además, si dicho contexto desfavorable no mejora, no se puede dejar de consumir aquello que de alguna forma está llenando el vacío.
Hall, W., Weier M -Lee Robins’ studies of heroin use among US Vietnam veterans.
Mcmillen, S. – . Los cómics de Stuart McMillen.