28 de junio de 2016
Caras vemos, ideologías no sabemos
Por: Andrés Fabián Orozco G.
Desde el pasado 29 de marzo, se anunció públicamente el inicio de los diálogos de paz con el ELN, “Con este nuevo paso, avanzamos de manera decidida hacia la paz completa” dijo el Presidente de la República, sin embargo, como lo dijo Rubén Chababo en una entrevista para El Librepensador, uno de los mayores retos en los diálogos será la construcción de la memoria histórica, ¿Cómo y porque nace el ELN? ¿Con quién se negocia?
Un origen religioso
El ELN tiene como base esencial, algo que para la década de los 60 era conocido como La Teología de la Liberación, teología que provocó en su momento un gran revuelo por lo que significaba que un grupo de curas se revolucionara contra las doctrinas sociales de la iglesia, llevó a que los sacerdotes cambiaran su forma de concebir la Teología Cristiana y lo enseñado en los seminarios por lo que en su momento debió ser enseñado en un aula de clase de una universidad especializada en Ciencias Políticas o Gobierno; pero ¿Dónde surge la Teología de la Liberación? La teología de la Liberación es uno de los resultados del Concilio Vaticano II y de la II Conferencia Episcopal de Medellín.
La Teología de la Liberación, para aquellos sacerdotes, buscaba mostrar a un “Jesucristo revolucionario” que como lo expresa Tarazona, escritor e investigador de la Teología de la Liberación, fuera capaz de controlar las masas en un sentido directamente político, pero con una relación estrecha de lo social y que tuviese como “opción preferencial los pobres”, sin embargo, hay mucho trecho entre la teoría y que unos curas se convirtieran en protagonistas del surgimiento del segundo grupo armado más importante del país.
Para los finales de la década de los 60 e inicios de la década de los 70, la Teología de la Liberación había sido expandida por toda América Latina, basada en la idea de una iglesia más humana y alejada del amor al dinero; pero estos curas “Revolucionarios” recibieron la oposición de la Iglesia Conservadora y en Colombia, empezaron a ser perseguidos tanto por la misma iglesia como por el Estado, lo que no fue un impedimento para que los Teólogos de la Liberación continuaran trabajando, Camilo Torres uno de ellos, dejo para la historia: “Incluso desde un punto de vista cristiano, toda revolución debía tener su contrarrevolución”
Nació esta Teología con un tono social, pero a medida que avanzaron y fueron atacados por la iglesia a la que pertenecían, tomo un tinte político expresado mediante lo escrito por sacerdotes brasileños y además ¿hermanos Clodovis y Leonardo Boff?, en un texto al que titularon como “Teología de lo Político”.
Sin embargo, el ELN, no solo nace y se desarrolla con base de La Teología de la Liberación, también cuenta con influencia de la Revolución Cubana y de seguidores de las ideologías de Ernesto ‘El Che‘ Guevara.
Los integrantes del ELN no solo eran sacerdotes revolucionarios sino también estudiantes universitarios seguidores tanto de la Teología de la Liberación como de las ideologías que se expresaban en la Revolución Cubana y que habían sido acogidas por el grupo armado, que contaba además con el apoyo de miembros radicales del Partido Liberal colombiano.
¿Con quien se empezará a negociar?
El ELN es la segunda guerrilla de Colombia, según el gobierno nacional está conformado por 2.500 combatientes, 5.500 menos de los que cuenta las FARC, pero los medios que usan en su actividad armada son iguales o peores a los usados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
El ELN se centra en atacar zonas mineras y petroleras del país, su comandante en jefe Nicolás Gabino Bautista alias “Gabino” entró a formar parte de las filas de estas milicias desde los 13 años; su dirigencia en el grupo armado se ha centrado en el control y manejo de los recursos naturales que, según el grupo insurgente, son explotados de manera injusta e ilógica, no solo por actores nacionales sino por empresas “gringas”.
Su tendencia y forma de actuar siguen los lineamientos originales, y mantienen el radicalismo propio de la iglesia católica aunque con una visión de liberalismo radical.
El Gobierno empezará a enfrentar un monstruo de dos cabezas: por un lado las bases radicales de la iglesia y por otro, el deseo y la ambición política del movimiento insurgente que buscó desde sus inicios una Colombia igual para todos y una iglesia que dedicara su riqueza a los más pobres y no la concentrara en unos pocos.
El camino se divisa mucho más complicado que con el proceso que se inició hace unos años con las FARC y que aún no ha terminado. El ELN es un movimiento armado, que, gracias a sus bases históricas, no conoce la palabra rendición.
Recomendados Librepensador:
El Clarín – Gobierno Colombiano y el ELN inician diálogos de paz
El Librepensador – Memoria Constructora de futuro. Entrevista con Ruben Chababo.
El País – Conozca la historia del ELN, la guerrilla colombiana fundada por sacerdotes