19 de agosto de 2014
El boom actual de los deportes inusuales
Por: Laura Daniela Cortés
La mayoría de personas alguna vez han jugado fútbol, baloncesto o tenis, ya que desde pequeños les inculcaron que la actividad física es buena para la salud. Del mismo modo, deportes como el ciclismo, automovilismo y los desarrollados en los Juegos Olímpicos, se han dado a conocer por medio de las transmisiones de radio y televisión. Pero a pesar de esto, la sociedad en general únicamente conoce una pequeña parte de todos los deportes existentes alrededor del mundo, y aún más en estos tiempos donde se crean nuevas alternativas que, como se tratará en este artículo, hacen parte de la libre expresión de la juventud actual.
El fenómeno de los deportes inusuales
Durante los últimos años han surgido distintos deportes que calificaríamos de “inusuales”, ya sea por su origen reciente o su poco reconocimiento mundial. Gracias a distintos movimientos juveniles alrededor del mundo, apoyados por instituciones educativas como colegios y universidades, se ha fomentado la práctica de distintos deportes. Uno de ellos es el ultimate, el cual hace algunos años no era tan popular como ahora y, debido a esta fama, se le han otorgado múltiples reconocimientos de carácter internacional, evidencia de esto son los campeonatos que se han venido realizando periódicamente durante los últimos años.
Los deportes “inusuales” suelen caracterizarse por ser híbridos entre diferentes deportes, mezclan las reglas y condiciones de cada actividad físca que lo conforma. Por ejemplo, se puede encontrar el boxeo-ajedrez o chessboxing y el polo-chusma o bikepolo. Estos se popularizaron a partir de la década de los 90 y comienzos del nuevo siglo en países europeos y Estados Unidos gracias a la creación de campeonatos mundiales, lo que llevó a su posterior reconocimiento internacional.
Asimismo, este tipo de deportes es la adición de actividades y quehaceres cotidianos en deportes ya existentes. Para ejemplificarlo, Henry Cookson es un joven británico quees nada más y nada menos el campeón mundial del extreme ironing o plancha extrema, un deporte que consiste en planchar una prenda de ropa en situaciones extremas como saltar de un paracaídas, montar bicicleta, nadar en el océano o escalar una montaña.
Pralelamente existen otros deportes como el fútbol sobre ruedas, carreras de cortacésped, lucha libre en chocolate y como olvidar, los famosos campeonatos de comida en Estados Unidos.Cada uno de estos con campeones mundiales reconocidos por organizaciones oficiales deportivas.
En Bélgica, por ejemplo, la Federación Internacional del Deporte ha sido una de las organizaciones que ha promocionado más la creación de nuevos juegos, basados en el pensamiento “deporte para todos” que busca unificar y dinamizar el deporte a partir de las corrientes globales del nuevo siglo.
Convivencia en sociedad
Como bien sabemos todos, el deporte es una forma para mejorar nuestro rendimiento, llevando una vida sana y activa, mejorando la concentración y la autoestima. Sin embargo, a pesar que actualmente se evidencia la práctica de deportes comunes, los jóvenes hoy en día no se conforman con practicarlos, puesto que el pensamiento y la actitud de las últimas generaciones ha permitido el desarrollo de nuevas formas de recreación a partir de iniciativas apoyadas por los gobiernos nacionales, que ven al deporte como una forma para mejorar la convivencia y cultura ciudadana.
Una tesis doctoral de la Universidad de Murcia en España asegura que fomentar la práctica de deportes mejora la convivencia dentro de las aulas, disminuyendo los índices de bullying o matoneo escolar, y adicional a esto, la importancia del papel de la libre expresión, que en los estudiantes, y en las personas en general, causa una baja en los índices de estrés.
La idea de la creación de nuevos deportes, además de fomentar una vida sana para los niños, jóvenes y adultos, es no dejar al lado la tradición de los deportes típicos de cada nación. Por el contrario, es verlos como una evolución según las necesidades y los requerimientos de la sociedad actual que también aprovecha estos espacios para aprender, enseñar y fomentar la cultura ciudadana, lo que contribuiría a mejorar nuestra calidad de vida.