23 de mayo de 2015
Salsa Choke, el ritmo afro que mueve a todo un país
Por: Nathalia Bowers Manzano / @nathaliabowers
Desde la presentación de la selección Colombia de fútbol en el Mundial de Brasil 2014 la salsa choke se popularizó en todas las regiones del país, pues cada vez que los jugadores anotaban un gol, lo celebraban con el paso tradicional de la canción “ras tas tas”. Las personas se vieron atraídas por este género proveniente del sur occidente colombiano, y empezaron a poner la canción de moda en las emisoras. No obstante, antes de que esto ocurriera, en los barrios afro del sur oriente caleño, en la Cali más pobre, desde el 2008, ya se bailaba lo que se conoce como “Salsa Choke”.
El Pacífico, la sucursal de la salsa choke
Este género de música del Pacífico es una mezcla entre salsa, hip hop, reggateon, rap y como las mismas personas que viven en este sector de la ciudad lo describen, consta de “mucha cadera, mucho movimiento de brazos en el aire y de pies. Así se baila cuando hay fiestas en los barrios, cuando se cierran las cuadras para gozar chocando”. Los pasos básicos son cuatro: el brincaíto, el más viejo de todos y consta de un movimiento un poco brincado hacia los lados. Por cada tres pasos laterales se levanta un poco la cadera; el cobando es el mismo paso base pero aquí las manos se desplazan hacia los lados; el champú, cuya expresión es igual a cuando alguien se echa champú, y el, último, pateando el balón.
La “Salsa Choke” se originó en Tumaco, pero su mayor éxito y en donde realmente empezó a cobrar fuerza, fue en el Distrito de Agua blanca, la localidad más pobre de Cali, en donde habitan los desplazados de la Costa Pacífica por desastres naturales y por la violencia del conflicto armado.
La reproducción se dio gracias a la venta masiva de CD´S piratas en las calles del centro de la ciudad. Al principio, nadie sabía cómo llamar a esté género, por lo que pedían las canciones describiendo el movimiento. Después en la FM se empezaron a transmitir algunos sonidos del ritmo afro. La primera en escucharse fue “Chichoki”, interpretada por el tumaqueño Cj Castro que pegó también temas como “Suéltate” y “Bien pegadito”.
Poco a poco, fueron surgiendo canciones como el “Bochinche” en donde se le hace una sátira a las vecinas bochincheras: ella todo quiere saber por eso la llaman la bochinchera, el bochinche se va a escuchar…” El autor es Yeison Ibargüen, más conocido como “ Jej”, fundador de la Integración Casanova. Otra que también se tornó pegajosa en la gente fue “La tusa” de la agrupación de 7 músicos de Guapi, Timbiquí, El Charco, Quibdó, Buenaventura y Cali y hace referencia a la envidia, pues en el Pacífico a esta se le conoce con esta palabra “Que tengo un buen marido, cuál es tu tusa, porque mi quincena es buena, cuál es tu tusa”, dice la canción.
A medida que el ritmo se fue expandiendo, en las discotecas más reconocidas se le empezó a abrir lo que popularmente se conoce en el Valle como “tanda” es decir, un espacio dentro de la programación.
La nueva cultura
Por otro lado, la salsa Choke ha logrado que muchos niños y adolescentes que viven en zonas marginales de la capital del Valle del Cauca se mantengan alejados de las pandillas, ya que se han impulsado fundaciones de baile que buscan la inclusión para promover el arte y la cultura. A nivel nacional se han creado, también, espacios en donde se le enseña a las personas a bailarla, pues desde que el ritmo se puso de moda con la participación de la Selección Colombia en el mundial, en otras ciudades se ha despertado la curiosidad por incluirlo dentro de lo que se escucha y se danza.
Además, ha empezado a ser introducida dentro de las coreografías de las academias y fundaciones de salsa más importantes de la ciudad, que a través del espectáculo muestran el folclor de la cultura pacífica. Entre las más reconocidas cabe resaltar a “Delirio”, una fundación nacida en el 2006, conformada por 580 personas como bailarines, coreógrafos, diseñadores de vestuario, alumnos y profesores del circo, músicos y escenógrafos. Tiene como base 300 artistas, que hacen parte de 4 escuelas de Salsa. Este se ha convertido en un espacio de innovación y oportunidad para personas de bajo recursos. Otra de las escuelas más destacadas es “Swing Latino”, cuya función social es la difusión y sensibilización del folclor urbano.
Así pues, la salsa choke ha generado importantes cambios en la sociedad al convertirse en un dinamizador de la cultura no sólo pacífica, sino, también, colombiana, pues logró que todo un país se sintiera representado a través de la misma expresión musical y corporal. Desde su popularización ha sido el puente para que muchos jóvenes dejen las armas por un micrófono y los cantantes de otros géneros la vean como una nueva apuesta musical.