Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales

16 de diciembre de 2015

TIPNIS en Bolivia: una contradicción absoluta.

Por: María Camila Huertas Sanz

La fricción entre la economía y el medio ambiente se da cuando los intereses contrarios chocan entre sí, afectando no sólo a quienes toman las decisiones, sino también a quienes sufren las consecuencias de estas. Los países latinoamericanos son ricos en recursos, en biodiversidad y culturas, en historia y pueblos tan maravillosos como antiguos: los indígenas, son un grupo protegido por los diferentes Estados en tanto minorías étnicas. La complicada situación que vive el presidente de Bolivia Evo Morales, es consecuencia del choque entre lo que se entiende por desarrollo y el gran apoyo que tenía por parte de la comunidad indígena: “Evo was a very strong symbol for many people. He emboied principles of justice, of human rigths. But now these people are disenchated” dice Jim Shuktz (Bolivians march against Evo Morales over jungle highway crackdown , 2012). Las consecuencias de las decisiones que suelen tomar los gobiernos, están directamente relacionadas con la sociedad civil, de aquí que aparezcan personas que se opongan a dichas decisiones pues sienten que les están violando sus derechos.

La intención de construir una carretera que atraviese el TIPNIS (Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro-Secure), va totalmente en contra de los derechos de los indígenas, pues este parque era destinado como su territorio, y de aquellos defensores del medio ambiente. Todo inicia cuando surge la ley que tiene por objeto “convocar al proceso de Consulta Previa Libre e Informada a los pueblos indígenas del TIPNIS y establece el contenido de este proceso y sus procedimientos” (Alcoreza). En realidad, la consulta no se ha llevado como lo indica el documento antes mencionado, a los indígenas no solo están violando sus derechos sino que tampoco se les consultó para la elaboración de la ley que les compete de manera directa. Es de esperar que, en ocasiones, siempre se protejan los derechos de los indígenas sobre las decisiones de desarrollo.

El amplio espectro del conflicto de intereses

Al ver la injusticia que se estaba cometiendo contra ellos decidieron alzar la voz y lo curioso es que no fueron todos los grupos en su totalidad, pues la marcha la organizó la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB) y la otra la hizo el Consejo Indígena del Sur (CONISUR), para apoyar la ley antes mencionada. Esta es una clara muestra, como lo dice Prada en su texto: “(…) un nuevo dispositivo normativo inconstitucional, de la misma manera y forma como las leyes aprobadas por la Asamblea Legislativa y promulgadas por el presidente lo son.” Es bastante confuso que al intentar proteger las comunidades indígenas, las decisiones del gobierno las pongan en contra, pues ¿quiénes ganan?, ¿cómo llegar a un acuerdo?, ¿a qué grupo defender?

Tras aprobar la ley 180 de la protección al TIPNIS, se siente un aire de desapruebo, puesto que dicha ley frenó el proyecto de la carretera, pero según se muestra “(…) no existen condiciones para modificar la Ley 180 de protección al TIPNIS, debido a la politización del tema, el riesgo de conflicto social y por que cualquier cambio en esta norma debe pasar por la consulta y el consenso entre los indígenas que habitan esta reserva natural”.

La cita anterior muestra de manera clara lo controversial del tema y demuestra de manera clara que las diferencias dentro de los grupos sociales son igual de complejas, pues hay quienes apoyan la construcción y quienes no, los conflictos entre los dirigentes complica de manera casi que compleja el trabajo del gobierno y limita el actuar del mismo.

La coca es un factor agravante del choque de intereses

Empero, en cuanto a la coca, es curioso porque: “ que quede en claro que todo ese territorio, curiosamente ubicado en el corazón de Bolivia (pleno centro del país), fue declarado previamente como reserva ecológica de orden intangible” (Temas Políticos, 2012). Tal como la zona que se tiene prevista para la carretera, los indios protegerán sus tierras y su entorno natural-económico, a pesar de lo que la sociedad los ha podido corromper en el negocio de la coca. Los indígenas lucharán por lo que consideran es propio, de allí que haya quienes estén a favor y quienes estén totalmente en contra.

La construcción o no de la carretera no implica el simple hecho de desarrollo económico que esta permita sino el choque de intereses, en cuanto a ideales indígenas, en cuanto a naturaleza y en cuanto a desarrollo, la suspensión de la construcción da espacio para que se replantee lo que implica el construirla, pero de igual manera da pie para que argumentos en contra también se refuercen o modifiquen.

Es normal escuchar y vivir bajo las percepciones y críticas de países desarrollados que pretenden que los países en vías de desarrollo aprovechen los recursos al nivel que ellos lo hacen, es sumamente complejo comparar a países latinoamericanos con grandes potencias mundiales, puesto que el camino de dicha comparación olvida lo que la historia social latinoamericana, como bien lo afirmó Gabriel García Márquez en su discurso al recibir el Premio Nobel. Es curioso que países que desearían tener las fuentes de recursos, como los que poseen los países en vías de desarrollo, y que perfectamente pudiesen explotar no las posean y por el contrario quieran no solo obtener los beneficios de dichas fuentes, sino también aprovecharlas hasta acabar con ellas. Es por esto que el choque entre los intereses de los indígenas, del gobierno, la economía y los ambientalistas hacen que la situación sea compleja, pero también de un alto interés para los países desarrollados en busca de ganancias. Es por eso que hay que encontrar un punto de equilibrio y decidir de manera acorde lo ideal para Bolivia, plantearse temas que no solo aprovechen los recursos que esta posee, sino que sean explotados de manera controlada para no afectar el ecosistema y ayudar a ese país a desarrollar su economía.

Referencias El Libre Pensador:

The Guardian – Bolivians march against Evo Morales over jungle highway crackdown.

The Guardian – ¿Puede Bolivia convertirse en una superpotencia de energía verde?

Creadess.org – Tipnis: crimen político, económico, social y ambiental.